martes, 3 de mayo de 2016

Soluciones Irrigantes (Segunda parte)


QUELANTES.
 
Se denominan quelantes las sustancias que tienen la propiedad de fijar los iones metálicos de un determinado complejo molecular. El término quelar es derivado del griego “Khele” que significa garra, así como de la palabra quelípodo pata de ciertas especies de crustáceos que terminan en pinza o garra como el cangrejo y que sirven para aprisionar a sus alimentos.
Los quelantes que presentan en el extremo de sus moléculas radicales libres que se unen a los iones metálicos actúan de manera semejante a los cangrejos. Esas sustancias roban los iones metálicos del complejo molecular al cual se encuentran entrelazados fijándolos por una unión coordinante lo que se denomina quelación.
La quelación es por lo tanto un fenómeno fisicoquímico por el cual ciertos iones metálicos son secuestrados de los complejos de que forman parte sin constituir una unión química con la sustancia quelante aunque sí una combinación. Este proceso se repite hasta agotar la acción quelante y por lo tanto no se efectúa por el clásico mecanismo de la disolución.

INDICACIONES DE LOS QUELANTES EN LOS TRATAMIENTOS DE LOS CONDUCTOS RADICULARES.

Las soluciones quelantes están indicadas para la preparación biomecánica de los conductos atresiados o calcificados. Prácticamente inocuos para los tejidos apicales y periapicales, son recomendados tanto para los casos de biopulpectomía como para las necropulpectomías. A pesar de los excelentes resultados obtenidos con este producto en cuanto a la limpieza de los conductos radiculares, no lo indicamos sólo como solución irrigadora, sino también como un auxiliar para el ensanchamiento de los conductos atascados con dentina, calcificados o ambas cosas.
A pesar de que parece que el hipoclorito de sodio es el irrigante más adecuado, no puede disolver partículas de dentina inorgánicas y evitar la limalla o barrillo dentinario (smear layer)
Por lo tanto se han recomendado agentes desmineralizantes como el ácido etilendiaminotetracético y el ácido cítrico.
ACIDO ETILENDIAMINOTETRACÉTICO (EDTA). Entre las soluciones quelantes utilizadas con mayor frecuencia para la irrigación se incluyen EDTA, EDTAC y RC-Prep (en México recientemente se introdujo al mercado Endo-Prep con la misma fórmula).
Nygaard Ostby sugirió primero la utilización del EDTA para la limpieza y ensanchamiento del conducto, posteriormente introdujo en EDTAC con Cetrimide (éste último un bromuro cuaternario amoniado, para reducir la tensión superficial y así favorecer la penetración).
El RC-Prep o Endo-Prep está formado por EDTA y peróxido de urea en una base de carbowax. Su popularidad en combinación con el hipoclorito de sodio es favorecida por la interacción del peróxido de urea de la solución que produce una acción efervescente la cual se piensa ayuda a desalojar por flotación los residuos de dentina. Esta propiedad nunca ha sido demostrda. Enfatizando, ninguna de estas pastas son adecuadas para su uso en endodoncia puesto que son ineficientes para prevenir la capa de barrillo dentinario (smear layer) y en lugar de disminuir el stress físico en los instrumentos rotatorios como se ha anunciado, los lubricantes con carbowax, dependiendo de la geometría del instrumento, no tiene ningún efecto o hasta resulta contraproducente. (Zehnder, pág. 393)
Ni el ácido cítrico y el EDTA deben ser mezclados con el hipoclorito de sodio. Son substancias que interactúan fuertemente entre sí. Tanto el ácido citrico como el EDTA inmediatamente reducen la cantidad de cloro en la solución haciéndola inefectiva sobre bacterias y sobre el tejido necrótico
AGENTES OXIDANTES.
PERÓXIDO DE HIDRÓGENO.
Al unirse con el hipoclorito de sodio produce burbujas que ayudan al escombro. Además la liberación de oxígeno va a destruir a los microorganismos anaerobios estrictos.
  La utilización alternada de agua oxigenada e hipoclorito de sodio está indicada en los dientes que se han dejado abiertos para facilitar el drenaje, pues la efervescencia favorece la eliminación de los restos de alimentos y otras substancias que hayan podido penetrar en el conducto.
  Nunca se debe dejar sellado en el conducto peróxido de hidrógeno pues la continua liberación de burbujas puede producir microenfisemas periapicales y periodontitis grave.

GLY-OXIDE (AMOSAN LÍQUIDO)
Es peróxido de urea en glicerina neutra. Con el hipoclorito de sodio desprende finas burbujas. Su gran capacidad lubricante lo aconseja en conductos finos y curvos, donde los quelantes al debilitar la dentina podrían producir perforaciones en la pared radicular. Se emplea poco por su baja actividad antimicrobiana y por ser mal disolvente del tejido necrótico.

OTRAS SOLUCIONES.
GLUCONATO DE CLORHEXIDINA. (Furuya, 7) 
Fue utilizado por primera vez en Inglaterra en 1954, como limpiador de piel y heridas. Químicamente es una bisbiguanidina catiónica comercializada como sal de gluconato. Se ha demostrado que la clorhexidina posee gran afinidad hacia la pared celular de los microorganismos, lo que modifica sus estructuras superficiales, provoca pérdida del equilibrio osmótico y la membrana plasmática se destruye, por lo que se formarán vesículas y el citoplasma se precipita. Esta precipitación inhibe la reparación de la pared celular y causa la muerte de las bacterias.
La clorhexidina es eficaz contra microorganismos grampositivos, gramnegativos, levaduras, aerobios o anaerobios y facultativos; los de mayor susceptibilidad son estafilococos, estreptococo mutans, S. salivarius, bacterias coli; con susceptibilidad mediana el estreptococo sanguis y con baja Kleilsiella. Los microorganismos anaerobios aislados más susceptibles son bacterias propiónicas y los menos cocos gramnegativos y Veillonella.
En diversos estudios se ha informado su posible utilidad como irrigante pulpar. Al parecer la clorhexidina ayuda a la adecuada regeneración de tejidos sin efectos tóxicos o irritantes, en comparación con otros agentes irrigantes tanto in vitro como in vivo. Asimismo, se han obtenido resultados satisfactorios en evaluaciones microbiológicas donde se ha comprobado la eficacia de la clorhexidina en conductos radiculares. También se ha empleado para la desinfección de los túbulos dentinarios con buenos resultados.

http://www.iztacala.unam.mx/~rrivas/limpieza2.htm 

No hay comentarios:

Publicar un comentario